Si está leyendo este libro, probablemente esté pensando en cultivar sus propias setas. O tal vez no. Tal vez sienta curiosidad por saber por qué alguien querría cultivar setas en particular. En cualquier caso, lo que probablemente no sepa es que cultivar setas puede ser una experiencia muy divertida y gratificante. Cultivar sus propios productos puede ser muy emocionante. Imagine lo que se siente al poder cuidar de sus productos y verlos crecer hasta convertirse en algo de lo que le puede beneficiar. Si es creativo por naturaleza y disfruta viendo cómo sus ideas y esfuerzos cobran vida, sentirá una gran alegría al ver prosperar sus setas.

Cultivar setas es también una tarea muy educativa. Aprenderá a cultivar y mantener sus plantaciones. Pero también aprenderá más sobre el papel de los hongos en el ecosistema. Cuando cultivas setas, comprendes involuntariamente el ciclo vital de los hongos, sus diferentes tipos y sus rasgos. Es algo que apreciará de verdad si le gusta obtener conocimientos generales y le encanta aprender sobre cosas diferentes.